Después de unos meses de acabar mi gran reto ha llegado el momento de cerrar definitivamente este blog que empecé hace más de un año.
Pasaré a limpio lo que escribí en el viaje de vuelta de Roth. He preferido dejar pasar un tiempo y madurar todo lo vivido en Roth y poder hacer una crónica de forma objetiva, dejando a un lado la euforia que tenía en las horas siguientes a la finalización del ironman en julio de 2011.
Resumen de parciales
JUEVES 7 JULIO
El jueves 7 de julio a las 13 horas venía a recogernos el gran José "el pati" en su megataxi y primer problema, la maleta de la bici no entraba, tuvimos que coger 2 taxis, Estrella y Gema en uno y yo con mi bici en el del pati. El tren salía de la estación de Córdoba a Sevilla a las 13 horas y llegamos a Sevilla de sobra para comer algo allí, coger el autobús que nos llevaría al aeropuerto. Más tarde haríamos trasbordo en Palma de Mallorca junto a Antonio Espejo para llegar a Nürnberg a eso de las 11 de la noche.
El siguiente problema que nos encontramos es que el coche que habíamos alquilado no estaba, pero gracias al inglés de mi Estrella pudimos solventarlo todo y cogimos un taxi-furgoneta que nos llevó a la puerta del hotel. La verdad que tuvimos suerte y nos vino mejor hacer esto ya que si hubieramos ido por nuestra cuenta nos hubieramos perdido seguro. A eso de las 1 de la mañana estabamos metidos en la cama. Ahora tocaba dormir.
VIERNES 8 JULIO
Nos levantamos tarde y pudimos descansar bien. Ese día tocaba montaje de bicicletas y probarla. No hubo problemas y todo se hizo con normalidad. Rodando por Roth, conocimos a Cristopher, un chico de allí que también lo haría pero por relevos. Nos ayudó bastante, de hecho por la tarde fuimos en su coche a la recogida de dorsales. El ambiente fue espectacular, miles de personas y ya empezaban a salirme mi vena de nervios. Disfrutamos mucho Antonio y yo y aprovechamos para la cena de la pasta. Luego fuimos a por las chicas y paseamos por Roth hasta la hora de dormir.
SÁBADO 9 JULIO
Esa noche también dormimos muy bien, era la más importante porque sabía que la noche del sábado dormiría bien poco. Después de desayunar nos fuimos a soltar las bicis a la zona de nado,un pueblo a unos 10 km del hotel: Hilpoltstein. Fue un poco caótico porque además de lo encogidos que íbamos en el coche con las dos bicis y 4 personas nos olvidamos el chip en el hotel por lo que tuvimos que regresar de nuevo. Al fin todo bien, soltamos las bicis y el material en boxes. Vaya subidón al ver tanta gente allí, el canal donde se nadaría era enorme...ufff que nervios. Al terminar de comer en un restaurante de la zona de boxes, nos fuimos a pasear un poco por la ciudad de Nuremberg, no todo iba a ser triatlón y Estrella y Gema querían conocer un poco la ciudad. Llegamos sobre las 8 al hotel, nos duchamos y fuimos a cenar pizzas, esa noche ya estaba muy nervioso, cené poco ya que los nervios me comían...
DOMINGO 10 JULIO: EL GRAN DÍA
Esa noche dormiría poco más de 2 horas, pero era lo esperado, a eso de las 4 de la mañana sonó el despertador y en pie como un resorte, había llegado el gran día. Estaba muy muy nervioso con ganas de empezar. Llegamos al canal sin problemas y pudimos aparcar bien, nos daba tiempo de sobra por lo que desayunamos en un restaurante de allí. Me despedí de Estrella y le dije, te veo en roth dentro de 12 horas mínimo, me equivoqué por poco, inicié el reto a las 7:40 y terminé a las 20:05, es decir: 12 horas 25 minutos y 47 segundos.
Lo primero fur ir al wc antes de preparar todo, lo hice tranquilamete y comprobando que no me olvidara nada. Tuve que ir un par de veces más al wc, ¡qué nervios!. A las 7:40 de la mañana estaría en el agua, eran las 6:30 y ya tenía todo preparado y el neopreno medio a poner. Queríamos ver las salida de los profesionales, vaya espectáculo, flipé y ya lo único que quería era nadar.
Era como un sueño poder estar allí, la música, la gente animando...uff!!! una pasada. Ya tocaba mi salida, la última antes de los relevos, 400 triatletas en cámara de llamadas. Me tire al agua y calenté un par de minutos, el agua estaba fría pero soportable. Pistoletazo de salida y a nadar, nadé con mucha calma deslizando y sin cansarme lo más mínimo, hice 1 hora 17 minutos en nadar 3,9 km, sin duda muy lento pero mi objetivo era terminar la natación sin agobios, lo conseguí. Sin lugar a dudas podía haber ido más rapido pero eso lo dejaremos para los sprint...¡soy un pakete! jejeje
Hice una transición larga, secándome bien, poniéndome la ropa de ciclismo al completo y comiéndome medio sandwich. Venía lo más largo, 180 km de bici. Era un circuito a dos vueltas pasando cada vez por la mítica "solar berg". La primera vuelta me planteaba como objetivo llegar a la solar berg y vivir in situ lo que tantas veces había visto en los videos. Efectivamente llegamos a un pueblo y ya había carteles del mítico lugar, iba pedaleando y oía a la gente gritar, no os lo creereis pero se me pone el vello de punta al recordarlo de nuevo. Era una recta y al final de ella se empezaba a ver a los cientos de personas al estilo tourmalet del tour de Francia, al final de esa recta había un giro a derecha y ahí estaba, yo estaba alucinando la gente te gritaba y yo me puse como loco levantando los brazos al oir "go go go Pedro Javier" de los spiker que había. Se puede ver en este video el ambiente.
Me emocioné mucho al pasar al lado de Estrella que tanto y tanto me apoyó durante todo el año y ahí estaba otra vez animándome, ¡qué grande eres!, la fenómena se vino desde allí a Roth haciendo autostop.
Sin darme cuenta subí la cuesta de unos 500 metros con el espacio justo para la bici, la gente te gritaba, animaba como no me podía imaginar. Cuando terminé la subida me cayeron dos lagrimones enormes. ¡Ya ya! ¡¡Soy un llorón!! Ufff, fue maravilloso, ya estaba deseando pasar otra vez por allí. La segunda vuelta se hizo corta deseando llegar otra vez, así fue, pero la segunda vez ya había menos gente, pero igual de emocionante porque las personas te animaban igual.
Después de pasar por la solar berg por 2ª vez ya no pensaba otra cosa que en llegar, la bici se me hizo relajada a un ritmo poco inferior a los 30km/hora. eso sí, los últimos 20 se me hicieron muy muy largos, quería llegar ya y pegarle una patada a la bici... Efectivamente, quedaban un par de km y mentalmente estaba pensando en todo lo que tenía que hacer y muy optimista de la carrera a pie, me encontraba muy entero para los 42 km que me quedaban. Estaba claro que el entreno duro del invierno había servido para algo.
Al llegar a la transición y soltar la bici, ¡que dolor!... al levantar la pierna derecha de la bici se montó el cuadriceps de forma bestial, me tiré al suelo del dolor. La organización un 10, una persona me llevo la bici a su lugar, y dos voluntarios me levntaron del suelo y otro me masajeaba el cuadriceps, parece que se me bajó un poco y me ayudaron a llegar a la carpa donde me cambiaría de ropa. Me llevaron en volandas entre dos voluntarios. Allí en la carpa me ayudaron a vestirme mientras que una voluntaria me masajeaba la pierna derecha y me echaba protector. Se lo agradecí profundamente, creía que no podría terminar, me dolía bastante pero consiguieron que bajara el dolor y pudiera empezar a correr. Empezé bien a un ritmo poco inferior de 5min/km pero cuando iba por el km 3 ó 4 no recuerdo muy bien otra vez hizo el amago de montarse de nuevo, y notaba que las piernas no iban, estaba muy acalambrado, así que fue toda una odisea lo que pasé. Mi objetivo era no andar hasta pasar por el km 21, pero no pudo ser, lo más sensato era parar en cada avituallamiento, cada 2,5 km beber algo y estirar, al principio paraba poco pero conforme pasaban los km tenía que parar mas tiempo. la carrera discurrió por una especie de canal de tierra, muy llanito y asequible. Era un ir y venir de triatletas con unas caritas...no era yo el único. Me crucé con Antonio por el km 10 más o menos, este sí iba bien, con una sonrisa nos dimos un abrazo y mucho ánimo. Tenía esperanzas de cogerlo a pie, el salió 5 minutos antes que yo, pero al verlo vi que era imposible. Al final hizo casi una hora menos que yo, ¡carrerón!
Me acordé de mucha gente: amigos del club, familia, el hijo de Joaquín que le dediqué más de un km, estaba pasando un mal momento y tenía que salir. Ahora me alegro porque va por buen camino, en fin los km iban cayendo pero aún faltaba el tío del mazo...
Lo peor llegó entre el km 25 y 28, nunca me había pasado. Fue un bajón de energía y fuerza que no podía dar un paso más, fue terrible. Me quité del camino y me senté en un árbol llorando como un niño, tenía claro que no podía más, no solo los calambres sino que no tenía ni un gramo de fuerza, el tío del mazo me dió bien. Me pusé en pie con la ida de volverme andando pero mi subsconciente me decía que nanai, así que me puse a andar hacia el siguiente avituallamiento con la esperanza de recuperarme, en ese momento pasaron mis ángeles de la guarda, eran dos chicos de Madrid, concretamente de Cercedilla, que me animaron diciendo, ¡vamos cordobés! ¡ánimo, vente con nosotros! yo le respondí que no podía con mi alma y uno de ellos, se volvió me cogió del brazo y tiró de mí. Eran hermanos, uno compitiendo y el otro le estaba acompañndo la 2ª media maratón, era médico y empezó a animarme diciendo que su hermano se había recuperado hace un rato y yo también lo haría.
Me dijo si había orinado, que tenía muy mala cara y necesitaba hacerlo cuanto antes, me encontraría mejor, sin darme cuenta ya estaba trotando con él hasta el avituallamiento, allí me dió isotónico y un trozo de pastel de arroz, también me tomé un gel. Fue un milagro porque en cuestión de minutos pasé de no acabarlo a estar seguro que lo terminaría. Al poco rato también oriné y bastante. ¡Qué alegría al ver que otra vez estaba sufriendo pero de otra forma! Todo cambió, ibamos hablando y la verdad que cuando me quise dar cuenta estaba en el km 35, nos cayó una tormenta que nos puso chorreando pero vino muy bien, lástima por las chicas que estaban esperando en meta porque lo pasaron muy mal. Del 35 al final llevaba las piernas que parecía robocop, un dolor tremendo.
Por fin llegamos a Roth, quedaban 2 km y ahí recuerdo que me emocioné muchísimo, iba por el pueblo cayéndome unos lagrimones tremendos, lo había conseguido. Lástima por la lluvia porque había poca gente por las calles, eso sí las orquestas tocando seguían animando. los últimos 500 metros fueron alucinantes, nos dimos un abrazo y se unieron a la fiesta unos amigos de la gente de Madrid, corriendo con nosotros y felicitándonos.
Fue impresionante ver la gente que había en meta a pesar de la lluvia, allí no hacía otra cosa que buscar a Estrella y Gema porque quería dedicarle una camiseta que tenía preparada a Estrella, oí las voces de Pedrooo! al más puro Almodóvar... las ví y nos dimos un abrazo y más lágrimas por parte de ambos dieron acto de presencia... ¡¡¡¡Yaaaaa!!!! soy un llorón pero es que ahora mismo se me vuelven a saltar recordándolo.
Me puse mi bandera de España, me puse "guapo" y listo para cruzar la meta, luego me enteré que hubo gente que me vió en directo entrar en meta...¡NUNCA LO OLVIDARÉ!
Os dejo el video que me ragaló Estrella para tenerlo de recuerdo y enseñarlo a los nietos...
VIDEO IRONMAN ROTH 2011
Pues nada amigos, con esta última entrada doy por terminado el blog y quizás dentro de unos años nos veamos en otra de estas. Ahora quiero cumplir otro objetivo muy importante en mi vida, cuando lo consiga será el momento de pensar en otro reto deportivo.
Un abrazo para todos/as, os quiero!!!